El Gobierno autorizó subas que tendrán un impacto promedio de 2,2% por ciento para los usuarios de gas y 1,6% para electricidad. Los hogares de ingresos medios sufrieron en los últimos 12 meses los mayores aumentos.
El Gobierno autorizó subas que tendrán un impacto promedio de 2,2% por ciento para los usuarios de gas y 1,6% para electricidad. Los hogares de ingresos medios sufrieron en los últimos 12 meses los mayores aumentos.
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El Gobierno definió el último día de 2024 los aumentos de tarifas para enero, que en promedio serán de 2,2 por ciento para las facturas de gas natural y de 1,6 para las de energía eléctrica, dependiendo del tipo de usuarios y los subsidios que reciben en función de los ingresos familiares.
Mediante las resoluciones ENRE Nº 1.060 y 1.061/2024, se establecieron los nuevos cuadros tarifarios con vigencia a partir del 1º de diciembre de 2024, que implican un incremento del 4% el el Valor Agregado de Distribución (VAD) para los casos de Edenor y Edesur, que son las únicas distribuidoras reguladas por el Estado nacional.
De esta manera, la suba en los ingresos de estas empresas acumulan desde febrero 2024 a enero 2025 un alza de 455 por ciento. Además, si bien el ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, estableció que el impacto en facturas debe ser del 1,6% -por la intención oficial de comenzar a reducir el “crawling peg- hay algunas variaciones según los segmentos de usuarios que determinan aumentos que van del el 0,8% al 2,4%.
Asimismo, los usuarios con mayor impacto son los de Nivel 3 (ingresos medios), Nivel 2 (ingresos bajos) y Comercios chicos principalmente, con incrementos reales superiores al 170, 165 y 149% respectivamente en el mismo período.
Por otra parte, la gestión libertaria también resolvió incrementar un 4 por ciento el transporte de energía eléctrica, pero en ese caso no se traslada a los usuarios finales.
El gas, más caro
El Ente Nacional Regulador del Gas (ENARGAS) también dio a conocer las resoluciones 907 y 925 de 2024 por las que incrementa en un 2,5 por ciento las ingresos de las empresas de transporte y distribución de gas natural, lo que redunda en una suba de 2,2 por ciento en las boletas de los usuarios sin subsidios.