PCR desembarca en la producción de petróleo no convencional en Estados Unidos

La empresa argentina concretó la compra del 15% del proyecto Cherokee, en la cuenca de Anadarko, y busca profundizar su expansión internacional.

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Post Energético

La empresa PCR anunció su desembarco en la producción de petróleo no convencional en Estados Unidos, con la adquisición del 15 por ciento del bloque Cherokee, ubicado en la cuenca de Anadarko, en Oklahoma (centro sur del país de Norteamérica).  Mediante una nota a la Comisión Nacional de Valores, la compañía informó que su subsidiaria PCR ENERGY OK LLC concretó la compra de ese bloque, orientado a la producción de shale oil y shale gas, que opera  la compañía estadounidense Upland Exploration LLC. 

El área completa tiene una extensión de aproximadamente 66.700 acres minerales (unas 27 hectáreas), con seis pozos ya perforados y uno en perforación. “El reservorio principal presenta alentadores niveles de productividad y, de acuerdo con el plan del operador, se prevé perforar 60 pozos en los próximos 4 años”, según la misiva. 

“Está adquisición constituye un hito en el proceso de expansión internacional de PCR, permitiendo el acceso a un activo de calidad geológica ubicado en una zona con abundante infraestructura en la producción de hidrocarburos en los Estados Unidos”, destacó PCR.  Si bien no está a la altura de Permian -la formación insignia del boom no convencional mundial- Anadarko es una fuente importante, de la que se tiene mucho conocimiento porque se perforó mucho en convencional.  

Desde la empresa detallaron que esta participación permite sumar 520 barriles equivalentes por día, de un total de 21 mil que PCR tiene en Argentina y Ecuador. Por los planes de perforación en marcha tienen la expectativa de que siga creciendo en los próximos años. 

La empresa, que nació como Petroquímica Comodoro Rivadavia hace un siglo, opera 11 áreas de hidrocarburos en Mendoza y La Pampa. A la vez que cuenta con filiales en Ecuador y Estados Unidos, sobre diversos proyectos. Además, se viene consolidando como el segundo generador de energía eólica, con una potencia total de 527,4 MW, a través de parques en las provincias de Buenos Aires, Santa Cruz y San Luis, donde recientemente inauguró el primero “híbrido” del país.